Cuando eras pequeño, ya te
lo dijeron tus padres: Si te dan un caramelo por la calle, ¡no lo cojas!
Cuando te casaste, te lo dijo
tu mujer: No te fíes de ese socio que te va a dar dinero, que seguro que busca
algo.
Y cuando fuiste más mayor,
nadie te lo tuvo que decir: Las deudas se pagan.
Durante los últimos días de agosto no hemos parado de sobresaltarnos,
especialmente ahora que con pocas -o ningunas- vacaciones seguimos las noticias con fruición.
Un día sube la bolsa de manera espectacular, para bajar al siguiente, y
volver a subir el tercero. Y nos preguntamos cómo es posible que la supuesta
octava economía del mundo –la española– esté a merced de especuladores que la agitan sin descanso.
Además, hemos pasado de oír que tal vez tengan que ayudarnos desde fuera, a
darlo por hecho y admitir que han de rescatarnos; y ahora sólo discutimos el tipo
de rescate. Todo ello con cifras mareantes de cientos de miles de millones de
euros.
Y mientras tanto, nos preguntamos cómo hemos llegado a esto, y cuando
terminará tanta desazón. Porque de anunciarnos la salida del túnel en 2013, oímos ahora 2014, 2015...
Hartos de respuestas complicadas a nuestras preguntas, hemos llegado a
pensar que tal vez la complicación proviene de tapar responsabilidades, o más
bien irresponsabilidades; para que no nos enteremos.
Así que vayamos a lo fundamental:
- ¿Por qué está España así?
Porque tiene mucha deuda.
- ¿Y qué tiene que hacer
para reducir la deuda?
Gastar menos o ingresar más.
- ¿Puede ingresar más?
No, porque como cada vez se produce menos, por mucho que suba los
impuestos, la recaudación total va disminuyendo.
- ¿Puede gastar menos?
Sí, porque de hecho los gastos superfluos o políticos no han sufrido
recortes drásticos.
- ¿Y por qué no gastamos
menos?
Porque los responsables de recortarlos son los mismos que los disfrutan.
- ¿Entonces qué estamos haciendo?
Pedir más dinero prestado.
- ¿Y qué pasará?
Pues que nuestra deuda será aún mayor.
Y ahora que se discute cuándo
llegará nuestro rescate, en forma de préstamo de Europa –sobre todo de
Alemania–, que no nos quepa la menor duda de que las deudas se pagan.
Para que estemos avisados.
Nosotros. Nuestros hijos. Y nuestros nietos.
_______________________________________________________
TÚ MANTIENES EL BLOG
TUS SMS NOS HACEN EXISTIR
TUS SMS NOS HACEN EXISTIR
Gracias por enviar un SMS al número 25588 con la palabra QUIEBRA
El coste es de 1,42 euros iva incluido
Gestión sms: Sit
Consulting SL. At. Cliente 902 116 106 info@sitmobile.com