Durante este año y casi medio de existencia, hemos venido comentando las
diversas medidas adoptadas por los dos gobiernos que hemos tenido.
Si somos los primeros en criticar todo aquello manifiestamente mejorable,
también sabemos alabar decisiones que pueden acortar la crisis, sobre todo para
los largamente sufridos ciudadanos.
La medida de ampliar las compras de pisos por parte del "Banco
Malo" a aquellos inmuebles en propiedad de los ciudadanos, traerá un soplo
de aire fresco a muchas familias que están pasando necesidad.
Como es bien sabido, los pisos actualmente en manos de los bancos, bien
porque eran suyos o porque los han obtenido tras los desahucios, van a ser
comprados por el "Banco Malo", creado con grandes aportaciones de
dinero público.
Pues bien, ahora hemos sabido que aquellos ciudadanos con rentas inferiores
a los 100.000 euros anuales, o con hipotecas superiores a los 300 euros, podrán
también vender sus viviendas al Banco Malo, y quitarse de ese modo los agobios
de la hipoteca.
Se trata sin duda de una medida de fuerte impacto social, que ayudará a
tantas familias en apuros, sobre todo porque se ha anunciado un complemento
salarial para aquellos que tras la venta al Banco Malo no alcancen una renta
mínima.
Dicho complemento estará en torno a los trecientos mil euros al año, más
una indemnización de seis millones de euros en el momento de la venta del piso.
La única condición es que los que reciban todo lo anterior hayan dirigido
antes una entidad financiera, y hayan causado un agujero de al menos 5.000
millones de euros.
Porque hoy es el día de los Inocentes. Y sólo pueden obtener beneficio los
inocentes. Ellos. ¿Ellos?